Siendo el tabaco una droga legal, cuyo consumo es socialmente aceptado, es difícil considerarla una enfermedad. Aunque en los últimos tiempos, dicho concepto ha ido cambiando al punto que considera casi al fumador un enfermo infecto contagioso que no queremos a nuestro lado.
- El primer paso es reconocer que tenemos un problema, aunque generalmente esto ocurre cuando aparece una consecuencia visible en deterioro de la salud, como la «EPOC».
- El segundo paso es querer cambiar y aceptar que hay una enfermedad que no puedo manejar.
- Tercero paso es consultar a un profesional de la salud para evaluar el estado clínico y a un especialista en adicciones para iniciar el aprendizaje para el cambio de estilo de vida.
Entender que será un cambio para el resto de tu existencia, si realmente has decidido que tienes una enfermedad y decidiste controlarla.
En mi libro «ESTO LE PUEDE PASAR TAMBIÉN A USTED», en los capítulos, ¿A QUÉ LLAMAMOS DROGAS?, ¿DROGADEPENDENCIA, VICIO O ENFERMEDAD?, ¿CUÁLES SON LAS ETAPAS POR LAS CUALES PASA UN CONSUMIDOR HASTA CONVERTIRSE EN ADICTO?, te permitirán entender más sobre tu problema.
Cada caso es único y particular, lo importante es reconocer que hay un problema y pedir ayuda especializada.